UNA FIESTA ERÓTICA "ENTRE AMIGAS"

Se acercan las navidades y este año me ha dicho mi amiga que será especial, quiere proponer algo peculiar. Os Invito a las cinco chicas a participar en una fiesta, para celebrar esta navidad de forma diferente. Esta es mi propuesta. Venid todas a mi casa, esa noche invito a cenar y también podéis quedaros a dormir. Al termino de la cena nos visitará una chica, la cual, hará una presentación de juguetes eróticos, probaremos nuevos artilugios para satisfacer nuestros deseos sexuales. Me pareció una buena idea y consentí, así y sin dejar lugar a preguntas, continuó con los detalles. Por ultimo quiero contratar a un masajista erótico, un hombre joven y con un cuerpo espectacular. Y he pensado que te encargues personalmente de esa tarea... Wow!! pensé con morbo en esa idea y me predispuse a pasar a la acción. Inmediatamente contacte con el grupo y por unanimidad asintieron con emoción. Acto seguido busque en internet, masajes eróticos . Rebuscando y comparando, elegimos a tres chicos espectaculares, pedimos información y más fotografías. Aún recuerdo las conversaciones subidas de tono y de erotismo entre nosotras. Y por fin contratamos a uno de ellos, por supuesto el más deseado por la mayoría. Llego el día esperado, fuimos llegando una a una y todo estaba listo, decoración fiestera, música alegre y las ansias de ver a ese macho bien armado “así le llamábamos en la intimidad”. Pasamos de la cena a la demostración de los novedosos vibradores y consoladores. Recuerdo un juguete en especial, el cual se introducía en la vagina y con un mando a distancia que dependía, del que lo tuviera en sus manos y que este dominaba subiendo o descendiendo la intensidad vibratoria a su capricho y deseo. fue uno de los juguetes más vendidos. Pero el morbo y el deseo, rondaba en nuestras mentes, por experimentar la soñada fantasía erótica. El timbre suena y alguien abre la puerta. Seguido de un silencio, escuchamos su voz y al unisono apareció así, como si de un ángel se tratara. Ahí estaba el mejor de los regalos, envuelto en un traje azul oscuro, con el pelo bien cuidado, largo y rubio. ¡Una sonrisa que enamoraba y un pequeño maletín. Un regalo que para nosotras, chicas cincuentonas, era un subidon de autoestima y de energía sensual. Al pasar los minutos ese bombón, lentamente se iba desempaquetando, dejando entrever una musculatura firme y unos pectorales bien marcados. Pasamos de inmediato a la acción y una de nosotras dijo, quiero ser la primera!! Apresuradamente se lanzó a por él, lo cogió de la mano y acto seguido se lo llevo a una de las habitaciones. En ese momento una pregunta resonó en la sala. ¿Quien será la próxima? Como no había acuerdo, decidimos hacer un juego, tomamos un papel lo dividimos en cuatro partes y numerando cada uno de los trozos, fuimos cogiendo turno. Mi mente ya imaginaba escenas, sentía sus manos pasar por mi espalda, metía sus dedos largos y gruesos entre mis piernas para masajear la parte interna de mis muslos. Entrando, saliendo, subiendo y bajando. Hasta llegar y tocar sutilmente mis labios vaginales. La excitación que siento, hace que me ruborice, noto que mis deseos aumentan, me voy mojando más y más, ya estoy preparada para entrar. Le pediré sexo oral y un final feliz, sí, ese será mi regalo. Quieres ser tú el próximo el regalo para nosotras?